Sunday, December 11, 2022

Bosquejos de una sociedad III

Toda la puta vida escuchando que soy un inútil, que vine al mundo para ser una carga para mi familia, que yo debería ocuparme de ellos y no ellos de mí -¿pero cuándo cojones se han ocupado de mí, su puta vieja madre, si ni siquiera de niño les preocupaba?-, que si no tengo un trabajo estable no merezco nada de la vida…viejos, sí, viejos egoístas que lo quieren todo, su vida fue muy dura, seguro, más que la mía, pero había trabajo para todos, no como ahora. No te jode, ¿por qué no me pagaron unos estudios en un colegio y una universidad decente, con tutores privados y esas mierdas que tienen los niños ricos? En su lugar, todo reproches, ¿que no sabes cómo hacer los deberes? Pues a trabajar en cuanto podamos mandarte, su puta vieja madre. ¿Cómo iban a gustarme los estudios, si todo lo que aprendí desde niño fueron palos y más palos por no cumplir sus expectativas? Y luego cúlpame por no querer subirme a un puto andamio y trepar por los bambús como un mono hasta que me caiga desde un piso treinta o más arriba y me reviente como un globo de agua, todas la tripas echadas por la acera, hala, ahora vete y hazte una olla hirviendo picante con todo eso…o vete a guardar una de esas torres privadas, con sus alquileres carísimos y sus gimnasios y piscinas privadas y qué se yo cuántas cosas más que no puedes ni tocar, no vaya a ser que las ensucies, no te jode… trabaja turnos de 12 horas pero sólo cobra ocho, y vaya mierda que cobras, y ponte el uniforme todos los días, que esté limpio, y que no se te rompa o te pagas el arreglo tú, el coño apestoso de su madre, y sonríe y agacha la cabeza cuando un hijoputa venga amargado de su oficina y te grite al llegar al portal y diga que va a quejarse de ti al supervisor porque no le has abierto la puerta y porque le sale de la minga, eunuco apestoso, no te jode… eso no va conmigo. No tendré trabajo pero al menos tengo dignidad. Y si me gasto lo que saco en cervezas y cerdo asado con los amigos, ¿qué, no es mi derecho?, ¿por qué tengo que dárselo a la vieja? Y al viejo mucho menos, para que se los gaste apostando a los caballos el domingo, siempre perdiéndolo todo, su puta vieja madre. Es lo que hay, no nací siendo uno de esos apestosos fantasmas blancos inútiles que hablan su lengua de espectros y con eso les bailan el agua en todos los sitios en esta ciudad de eunucos, no te jode…ah, pero eso ahora va a cambiar, ahora China es poderosa, ya van tardando en irse a su puto país todos esos parásitos, que ya han abusado demasiados años aquí, a ver qué van a hacer ahora, su puta vieja madre, nací demasiado pronto, el destino me la ha jugado. Igual si jugara hoy al Marca 6…o una partida de ma-jeuk en ese antro, ahí se juegan dinero de verdad, te sale bien y te llueven cofres de oro del cielo, ostia, pero te sale mal, ¿y qué?, luego acabas como Mok, ese pobre imbécil, conduciendo el puto mini autobús durante meses para pagar sus deudas y que no le saquen las tripas a él y a su familia y las sirvan en un cuenco de fideos humeantes, su vieja madre, ¿tiene gracia o no, eh? Sociedad armoniosa, sí, hombre, eso nos dicen los jefazos que salen en la tele con sus trajes caros y sus títulos universitarios ingleses o americanos o de su puta madre, seguro que allí aprendieron a comportarse como serpientes, ah, pero eso va a cambiar ahora, ¿o no? Mis viejos no tuvieron ninguna oportunidad, y yo, ¿qué sé yo? Me llamaban inútil y mono retardado desde crío, su puta vieja madre, igual si me hubieran criado entre algodones. Mira, mejor no tener hijos, no tener mujer, todo preocupaciones, total, para que vivan esta vida, quién sabe, su puta vieja madre…